¿Quieres ser Amigo de Dios?
“Porque si, cuando
éramos enemigos de Dios, fuimos reconciliados con él
mediante la
muerte de su Hijo, con cuánta más razón, habiendo sido
reconciliados,
seremos salvados por su vida” (Romanos 5:10)
Dios no solo desea tener una relación con nosotros como: nuestro padre, nuestro creador, el Señor y mucho más, Dios anhela ser nuestro amigo, mejor dicho nuestro mejor amigo.
Un ejemplo ideal para comenzar sería la relación que Dios tenía en el jardín del Edén, allí vemos una relación íntima de Dios con Adán y Eva, no habían rituales, ni ceremonias, ni religión, ni fiestas, ni tardes de té, ni sorpresas simplemente había una relación sencilla y cariñosa entre Dios y las personas que él había creado.
Cuando Dios nos creó nos hizo para vivir continuamente y apasionados por su presencia. Pocos hombres fueron llamados amigos de Dios como lo fue: Moisés y Abraham y pocos tenían una íntima relación con él como lo fue Job, Enoc, y Noé, y como fue el caso de David un hombre conforme al corazón de Dios.
La amistad con Dios solo es posible por su gracia y el sacrificio de Jesús. Dios tiene un anhelo intenso de que lo conozcamos íntimamente. En efecto, planificó el universo y estructuro la historia incluyendo los detalles de nuestra vida para que pudiésemos ser amigos suyos. << Fiel es Dios, quien los ha llamado a tener comunión con su Hijo Jesucristo, nuestro Señor >> 1Corintios 1:9
¿Cómo podemos conversar con Dios? Podemos ser mejores amigo de Dios teniendo una conversación constante con él, y no solo es posible tener una relación estrecha con Dios si solo vamos a la iglesia una vez a la semana, si somos espectadores, ni tampoco si tenemos un rato a solas con Dios. La amistad con Dios se cultiva es decir es un proceso en donde compartimos con él todas nuestras vivencias.
Es necesario conocer que para tener una relación íntima con Dios, debemos ser jugadores dentro de la cancha. Ejemplo: antes de jugar fútbol, nos debemos preparar, entrenar y dar lo mejor de nosotros dentro de la cancha, así mismo sucede con nuestra relación con Dios, debemos prepararnos, entrenarnos y luego salir a dar lo mejor de nosotros y no quedarnos a “calentar la banca”.
Un rato a solas con Dios; él quiere ser más que una cita apartada en nuestra agenda, quiere ser el centro de nuestras conversaciones, en cada una de nuestras actividades, incluso en nuestros problemas y hasta en cada uno de nuestros pensamientos, en esto se basa aquel versículo que dice “oren sin cesar”.
Como lo dijo un escritor “La clave de la amistad con Dios, no es cambiar
lo que uno
hace, sino cambiar la actitud de uno al hacerlo”. Es decir que
lo que normalmente haces para ti, comienza hacerlo para Dios.
lo que normalmente haces para ti, comienza hacerlo para Dios.
“De un solo hombre hizo todas las naciones para que habitaran toda la tierra; y determinó los períodos de su historia y las fronteras de sus territorios. Esto lo hizo Dios para que todos lo busquen y, aunque sea a tientas, lo encuentren. En verdad, él no está lejos de ninguno de nosotros.” Hechos 17: 26-27
Si eres principiante no te preocupes todos los fuimos en algún momento, y si no sabes cómo mantener a Dios en cada momento pues has algo sencillo, crea recordatorios o pequeñas frases que te ayuden, en este caso las llamaremos “oraciones de aliento” ejemplo: “Tú estás conmigo”, “Quiero conocerte”, “Ayúdame a confiar en Ti”, “Acepto tu gracia y tu perdón”, “Enséñame a Amarte” o apréndete versículos cortos.
Practicar o entrenarse para la presencia de Dios es una destreza, un hábito que se puede desarrollar, es como los músicos practican escalas todos los días para tocar melodías hermosas. Conocer y amar a Dios es nuestro gran privilegio; ser conocido y amado por él es su mayor placer.
Recuerda algo muy importante NO IMPORTA quién eres o quien fuiste, Dios envió a su único hijo para que muriera por nosotros y nos limpiara de todos nuestros pecados, para así poder tener una relación íntima con él.
Dejémonos llevar por su amor y su presencia y así nos acercaremos más a él. Como en cualquiera amistad, debemos trabajar para desarrollar la nuestra con Dios, ella no se da por casualidad. Requiere voluntad, tiempo y energía.
Si deseas un vínculo más estrecho con él, necesitas ser 100% sincero, decirle todos tus sentimientos, creer en lo que le pidas, aprender a interesarte por él, y desear su amistad más que ninguna otra.
Te pongo de ejemplo, todos tenemos amigos en la tierra y tenemos unos que los llamamos mejores amigos y hacemos lo posible para agradarles y que nos quieran como hermanos, le damos todo lo que nos piden, los complacemos, incluso solemos tenerlos como un ídolo, hasta creo que le prestamos más atención a ellos que a lo que Dios quiere hacer en nuestras vidas.
Solo paso a decirte recuerda que Dios es un Dios celoso, y quiere que todo tu tiempo sea invertido y dedicado a él, así mismo como haces todo lo posible para agradarle y tener una relación íntima con tu mejor amigo, has lo mismo e incluso hazlo mejor para Dios.
Recuerda los puntos importantes:
· Debes ser sincero con Dios
·Debes obedecer a Dios en Fe
·Debes valorar lo que Dios valora
·Debes desear la amistad con Dios más que nada
Como se dijo anterior debes cultivar una relación con Dios, ya que esa relación durara para siempre. Recuerda que estar cerca de Dios es decisión tuya.
“Acérquense a Dios, y él se
acercará a ustedes” Santiago 4:8
Ictiana L. Vega S.